La bailarina Lucía Lacarra dará vida al trágico personaje creado por Sófocles acompañada por el bailarín Josué Ullate en los roles protagonistas y un amplio cuerpo de baile
El ballet se estrena el viernes y estará en cartel hasta el domingo
«Es una Antígona con mucha fuerza y diferente a las que se han visto en el Teatro Romano de Mérida», afirma Ullate
Antígona, una de las tragedias míticas de la cultura grecolatina y más representadas en el Teatro Romano de Mérida, vuelve al Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida y lo hace bailando. Víctor Ullate ha llevado a la danza este drama creado por Sófocles para la edición número 65 del Festival que se estrena el viernes y estará en cartel hasta el domingo.
Antígona, representada por primera vez en el año 441 antes de Cristo, se muestra en esta coproducción del Festival de Mérida y el Víctor Ullate Ballet como una obra actual e impactante que deja en evidencia la atemporalidad de la naturaleza humana, que habla sobre los sentimientos tan antiguos como la humanidad misma.
Antígona encarna el conflicto entre la conciencia y la obediencia. Es la historia de la hija del Rey Edipo, una joven que decide enterrar a su hermano, muerto en batalla por el control de Tebas. La mujer realiza las honras fúnebres al cadáver, pese a que el nuevo Rey de la ciudad ha ordenado no hacerlo. Es ese rigor intransigente con el que actúa, convencida de que está haciendo lo correcto, lo que convierte a Antígona en una de las figuras teatrales más famosas de la historia.
“Principalmente inspirados por el conflicto de cada figura, confiamos en el poder de la danza que, como ninguna otra forma de arte, permite abrir la entrada a las esferas de las emociones universales”, así explica el maestro Ullate la esencia de esta producción cuya dirección y coreografía comparte con Eduardo Lao. “Es una Antígona con mucha fuerza y espero que diferente a las que se han podido ver con anterioridad en el Teatro Romano de Mérida”, asegura Ullate.
Lucía Lacarra y Josué Ullate son los protagonistas de esta versión libre de la obra original de Sófocles. Ella en el papel de Antígona y él en el de Hemón, hijo del actual rey de Tebas y prometido de Antígona. La química entre ambos bailarines hace de esta interpretación una verdadera obra de arte que no dejará a nadie indiferente. La bailarina Laura Rosillo sustituirá a Lucía Lacarra el domingo en el papel de Antígona.
Víctor Ullate, estrella internacional de la danza, fundó en 1988 la compañía que lleva su nombre y que cuenta con una larga y prolífica trayectoria como primera compañía privada española de nivel internacional. A lo largo de estos treinta años, ha dado la vuelta al mundo con sus giras y su repertorio, que abarca todas las facetas del ballet, y ha obtenido numerosos galardones, entre ellos, el Premio Nacional de Danza, la Medalla de Oro de las Bellas Artes, el Premio MAX de Honor y la Medalla de Oro al Mérito en el Trabajo.
Esta compañía, que además cuenta con escuela propia, cantera de futuros profesionales, se incorporó en 2017 al del marco jurídico y legal de la Fundación Víctor Ullate, creada en el año 2000 con un claro objeto social de difundir y preservar la Danza como uno de los valores fundamentales de nuestro Patrimonio Cultural, no sólo a nivel nacional, sino también internacionalmente.
Estos dispositivos, que reproducen el sonido en forma de vibraciones, se unen al bucle magnético, la audiodescripción y el subtitulado, haciendo que el festival sea plenamente accesible
Tres usuarios de Fedapas (Federación Extremeña de Discapacitados Auditivos Padres y Amigos del Sordo) disfrutaron en la noche del martes del estreno de Dionisio, de Rafael Amargo, gracias a las mochilas vibratorias que el Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida ha puesto a su disposición por primera vez este año.
Carmen, Teresa y Paco estrenaron las mochilas vibratorias que registran las frecuencias de sonido y las reproducen en forma de vibraciones. De esta manera, la persona que porta la mochila siente la música a través de la vibración. Este dispositivo está adaptado a todos los públicos y ofrece total autonomía y libertad de movimiento. No requiere una ubicación específica en las gradas, así que los usuarios que lo soliciten pueden comprar el tipo de entrada que más les interese.
De los tres primeros usuarios que probaron las mochilas las dos mujeres son sordas profundas, pero tienen prótesis auditivas, mientras que Paco es sordo total; no escucha absolutamente nada. Para él fue una experiencia 100% positiva en todos los sentidos, ya que nunca había ido al teatro, estaba emocionado y sorprendido.
Paco se sorprendió al sentir el zapateo, las palmas, los instrumentos… y hasta bailó en la silla. El número de bailaora con los palillos le gustó mucho, e incluso le preguntó a su hermana que si lo que tenía la mujer en las manos eran castañuelas ya que quería identificar las vibraciones que estaba sintiendo con el instrumento.
Las otras dos usuarias también quedaron también muy contentas. Fue una experiencia nueva para ellas, otra manera de entender la música, ya que al tener prótesis pueden escucharla, pero no de la misma manera que un oyente, por tanto, la experiencia de las mochilas fue un plus.
Los tres usuarios han anunciado que el sábado quieren volver y probar de nuevo con el espectáculo de Víctor Ullate. Las mochilas vibratorias están disponibles para los dos espectáculos de danza, Dionisio (16 y 17 de julio) y Antígona (del 19 al 21 de julio).
La 65 edición del Festival de Mérida es plenamente accesible para las personas con diversidad funcional sensorial. Además de la mochila vibradora, los servicios de apoyo a la comunicación que se ofrecen gratuitamente al público son:
Los servicios de audiodescripción y subtitulado no requieren una ubicación específica, la zona de influencia es todo el teatro, por lo que el espectador podrá elegir su entrada para cualquier zona del recinto.
El Museo de Lisboa-Teatro Romano acoge esta muestra que recopila imágenes y planos de cómo era el espacio arquitectónico del teatro emeritense en la época romana
La exposición es el resultado de 7 años de trabajo dirigido por los arquitectos Jesús Martínez Vergel y Rafael Mesa Hurtado, que han participado en las últimas restauraciones arqueológicas del teatro
La iniciativa forma parte de la colaboración del Festival en la sexta edición del Mostra Espanha 2019 en Portugal
El Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida muestra en Lisboa la historia del principal monumento de Mérida y uno de los más relevantes del mundo: el Teatro Romano de Mérida, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1993.
La arquitectura del Teatro Romano de Mérida, como escenario vivo y universal con más de 2.000 años de antigüedad, es el arquetipo arquitectónico de cómo eran los edificios teatrales en la época romana.
La exposición Mérida. Theatrum Mundi que acoge desde hoy y hasta el 31 de agosto el Museo de Lisboa-Teatro Romano (rua de S. Mamede) permite conocer esta arquitectura y apreciar aún más la joya patrimonial que es este monumento extremeño y que acoge aún las representaciones teatrales para las que fue concebido, como el Festival de Mérida que celebra estos días su 65 edición con nueve grandes espectáculos programados en el monumento, desde ópera, danza y teatro, que podrán disfrutarse hasta el 25 de agosto.
Con esta exposición, el Festival de Mérida participa en la sexta edición de Mostra Espanha 2019, un programa de actividades culturales que tiene como finalidad principal mostrar el dinamismo y la creatividad de las industrias culturales españolas al público portugués. Las actividades de Mostra Espanha 2019 llevará diversas actividades en veinte localidades de todo el país.
El director del Festival de Mérida, Jesús Cimarro, ha asistido esta tarde a la inauguración de la exposición acompañado por la consejera de Cultura de la Junta de Extremadura, Nuria Flores.
Jesús Cimarro ha destacado el valor de mostrar al mundo la historia del Teatro Romano de Mérida y darlo a conocer en esta ocasión en la capital portuguesa como la mejor estrategia de promoción del Festival y de Extremadura en el país vecino.
La exposición
La exposición, que se montó por primera vez en la edición del año pasado del Festival de Mérida, es el resultado de siete años de trabajo de un equipo de personas dirigido por los arquitectos Jesús Martínez Vergel y Rafael Mesa Hurtado, que participaron en las últimas restauraciones a las que ha sido sometido el monumento.
La muestra recopila planos históricos, proyectos y fotografías inéditas del teatro. También dibujos de secciones y plantas del estado actual del edificio separando las partes originales y las partes que son restauradas.
Tomando como base el estado actual y sus restauraciones, el equipo de trabajo ha hecho un análisis crítico para saber cómo era el teatro en la época romana cuando aún tenía todos sus revestimientos de estuco rojo, sus telas en toldos y telón y las maderas de la escena. Esto ha creado una imagen muy distinta de la que se tiene actualmente del teatro como ruina arqueológica.
La exposición se organiza en 3 niveles. El inferior con los planos de la realidad actual y los de las distintas restauraciones, el nivel intermedio de las palabras donde se explica las partes del teatro y el nivel superior donde están las imágenes de ordenador que recrean cómo era el teatro en la época romana.
El título Mérida. Theatrum Mundi hace referencia a la doble condición del Teatro de Mérida como arquetipo de teatro romano, y el tópico literario que entiende la realidad donde vivimos como un escenario donde todos somos actores representando nuestros diferentes papeles y no importa lo que somos sino el papel que representamos.
La exposición puede visitarse hasta el 31 de agosto de 10 de la mañana a 6 de la tarde. El museo cierra los lunes.