Memorias de Adriano es un espectáculo basado en la novela Memorias de Adriano de Marguerite Yourcenar. Este texto, mundialmente conocido, es un testimonio en primera persona de la vida del emperador romano nacido en España. Es, en términos literarios, una falsa autobiografía. En términos teatrales, por lo tanto, es una falsa personificación: Adriano no vive en el siglo II, aunque lo recuerde. Esta unión de planos es el universo de nuestro montaje. Con un lenguaje lleno de lirismo y con una admiración hacia su perfil helénico, Yourcenar recrea la figura de un mandatario tan sabio y magnífico como ciego y contradictorio. En ambos perfiles se dibuja el gesto de la soledad. Tomando este tema como columna vertebral del espectáculo, la directora Beatriz Jaén ha creado un espacio escénico en donde los ecos de esa soledad resuenan en la actualidad del poder, de la política y de la creación de una imagen pública.
Lluís Homar es Adriano; Adriano es también Lluís Homar: actor de sí mismo en muchas circunstancias, incesante buscador de respuestas filosóficas y viajero espiritual. Su voz, a veces secreta y a veces ostensible nos guía a través de esa experiencia común: el peregrinaje del ser. Acompañado por un séquito que le cuida a la par que lo apresa, Adriano preparará el legendario discurso donde lega el poder a Marco Aurelio. Su memoria será el resultado su imperio, pero también la confesión de un hombre que ha tocado los límites de la experiencia humana.
Memorias de Adriano es un espectáculo teatral que representa al mismo tiempo una emocionante película de romanos y el íntimo relato de un hombre en diálogo con su historia, con la Historia.